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Factores que Pueden Favorecer la Aparición de Neoplasias en Gatos

Las neoplasias en gatos ocurren por alteraciones en el interior de las células, como consecuencia de diferentes mecanismos que aumentan la multiplicación de las células y/o reducen su destrucción natural.

Este artículo no se centrará en estrategias para prevenir el cáncer, sino en reflejar las circunstancias o situaciones que pueden favorecer su aparición. Esto permitirá realizar una vigilancia activa de la salud de nuestros gatos, con un enfoque preventivo, si se encuentran en alguna de estas situaciones:

  • Exposición al Tabaco y Riesgo de Neoplasias en gatos

La exposición al tabaco en personas tiene un conocido efecto cancerígeno. Asimismo, se ha visto que aumenta la incidencia de linfomas nasales en gatos y se asocia a la mutación de un gen (el gen p53), presente en los carcinomas de células escamosas orales.

Por ello, si nuestros gatos presentan síntomas que podrían relacionarse con linfoma nasal y viven en un entorno donde está presente el tabaco, estos síntomas deben ser evaluados para discernir su causa.

  • Exposición a la Luz Solar y Carcinomas

La exposición a la luz solar (rayos UV B) se correlaciona con la aparición de carcinomas de células escamosas en orejas y nariz, especialmente en zonas con poco pelo y colores claros.

Un gato blanco frecuentemente expuesto al sol que presente un crecimiento anómalo en estas zonas podría tener mayor probabilidad de desarrollar este tipo de tumor.

carcinoma en pabellon auricular asociado a exposicion al sol
  • Influencia del Estado Hormonal en Gatas

El estado hormonal es un factor muy importante, especialmente en gatas. Las gatas no esterilizadas de forma temprana presentan una incidencia de tumores mamarios (en su mayoría malignos) significativamente superior (más del 80%).

En perros no castrados, se ha visto una reducción de la incidencia de algunos tumores, aunque esto se desconoce en gatos.

  • Virus Relacionados con Neoplasias Felinas

Los virus de la leucemia felina (FeLV) e inmunodeficiencia felina (FIV) están relacionados con la aparición de linfomas y leucemias. El FeLV induce directamente la aparición de linfomas, aumentando considerablemente la probabilidad en gatos infectados. El FIV, al provocar inmunosupresión, también puede derivar en linfomas y leucemias.

Es crucial incluir estudios relacionados con estas enfermedades en las revisiones habituales de gatos positivos a FeLV y FIV.

  • Efectos de los Tratamientos Inmunosupresores

Los tratamientos inmunosupresores pueden favorecer la aparición de ciertos tumores sólidos y linfomas debido a la desregulación del sistema inmunitario.

Gatos en tratamiento inmunosupresor deben ser monitorizados regularmente, incluyéndose la vigilancia oncológica para detectar posibles desarrollos de neoplasias.

  • Implantes Quirúrgicos y Riesgo de Sarcomas

Los implantes quirúrgicos que producen rechazo o inflamación crónica pueden desencadenar la aparición de un sarcoma. Si se observa una reacción adversa, es esencial retirar o sustituir el implante y realizar una vigilancia activa a largo plazo.

  • Inyecciones y Sarcomas Asociados a Puntos de Inyección

Algunos tratamientos inyectados (vacunas y fármacos) pueden causar inflamación local, y si esta se cronifica, podría favorecer la aparición de sarcomas asociados a puntos de inyección.

Si un bulto aparece en la zona de una inyección recurrente y no responde a masajes, debe ser estudiado rápidamente.

  • Tratamientos Antineoplásicos y Aparición de Otros Tumores

Algunos tratamientos antineoplásicos, como ciertos quimioterápicos y la radioterapia, pueden inducir la aparición de otros tumores distintos al que se está tratando. Estas consideraciones son vitales al planificar una terapia oncológica.

  • Enteritis Crónica y Riesgo de Linfoma Alimentario

La enteritis crónica, mediada por la inflamación, puede inducir cambios celulares que favorezcan la aparición de neoplasias. Una enteritis linfoplasmocitaria puede convertirse en un linfoma alimentario de bajo grado si no se trata adecuadamente.

En general, los cambios en la salud de nuestros gatos deben ser evaluados por un equipo veterinario especializado en medicina felina. La aparición de bultos o masas siempre debe ser motivo de consulta, especialmente si el gato presenta alguna de las circunstancias mencionadas.

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